«La literatura no es agotable, por la suficiente y simple razón de queun solo libro no lo es».«Menoscabo y grandeza de Quevedo» señala los rostros múltiples delautor; «La nadería de la personalidad» quiebra el conjunto del yo; «Laflor de Coleridge» reivindica la supremacía de la tradición; y «Kafka ysus precursores», por ejemplo, cuestiona el sentido de las influencias.